En el mundo de la musica existe desde practicamente siempre la tendencia a fabricar o alimentar leyendas ya sea sobre musicos o sobre las propias bandas. Historias sobre satanismo, drogas, sexo o mensajes subliminales han alimentado con mayor o menor fortuna a diferentes artistas. Uno de los primeros casos, cuando menos inquietante, fue el del bluesman Robert Johnson. Se dice ¿el mismo se vanagloriaba con ello? que hizo un pacto con el mismisimo principe del averno para alcanzar el exito. Cierto o no, lo que es innegable es que sus siniestras letras tenian claras referencias hacia el diablo y el infierno. Tampoco desmerece su propia muerte. Unos dicen que murio envenenado, otros de sifilis y otros de neumonia. En todo caso se le encontro en un callejon a cuatro patas y aullando como un poseso....
Otra muerte extraña fue la de Bessie Smith. Fue victima de un atropello y en los hospitales se negaban a atenderle por ser de color. Se dice que Janis Joplin pago su tumba en 1970 y puso el epitafio de "para la mejor cantante de blues"
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